Marcos Rojo y Alan Franco protagonizaron una de las jugadas más polémicas de la última fecha del campeonato argentino.
Un evidente codazo que le propinó Rojo al ecuatoriano finalmente y pese a la presencia del VAR no fue sancionado.
El veredicto del VAR dice lo siguiente: “La jugada fue considerada como un golpe sin demasiada violencia, ya que el impacto se da con el antebrazo en el hombro del jugador de Talleres.
Minutos después, el mismo VAR determinó una penal a favor de Boca el cual le sirvió para imponerse sobre Talleres en los minutos finales del partido.
